El intendente del Biobío, Sergio Giacaman se reunió con sus antecesores en el cargo para abordar el estallido social en el país, que ya cumple más de tres semanas de manifestaciones.Tras el encuentro, al que llegaron Martín Zilic, Jacqueline van Rysselberghe, Víctor Lobos y Rodrigo Díaz, Giacaman reconoció que permitió acercar posturas y conocer las propuestas de las ex autoridades.»Lo que está ocurriendo es que en todos los círculos se está produciendo el desencuentro y yo creo que la respuesta es generar espacios de encuentro para generar unidad», señaló el intendente.Junto a esto, precisó que “ellos me han transmitido su preocupación, pero también ideas, propuestas concretas para poder abordar no sólo los temas de fondo, sino que desde luego también ponerle un rostro regional a la situación que estamos viviendo».»Las propuestas están vinculadas a tácticas policiales, también en la incorporación de tecnologías, hay algunas de esas cosas que están en conversación y que mañana (hoy) serán abordadas con el general Medina», agregó.Por su parte, Rodrigo Díaz (ex DC) planteó que «hablamos de medidas integrales, no es sólo una u otra, son un conjunto de medidas políticas, policiales, económicas y simbólicas las que podrían hacernos salir de esta situación, pero dentro de las reglas del Estado de Derecho».Víctor Lobos (IND) coincidió en que las medidas deben ser abordadas de manera integral, pero asegurando el orden público. «La mayor experiencia que podemos transmitir es abrir canales de participación, escuchar a la gente y encausar las aspiraciones, con especial atención a quienes lo han pasado mal, como el comercio», dijo.La ex intendenta y presidenta nacional de la UDI, Jacqueline van Rysselbergue, comentó que «lo que vemos es violencia política, imponer la violencia para imponer ideologías. Más allá de las ideologías, lo que tenemos que hacer es buscar convergencias para poder, a través de los canales democráticos, sacar adelante al país».Finalmente, Martín Zilic (DC) afirmó que «lo importante hoy es que nos juntemos, intendentes de distintos signo político, para ver como avanzar en la región y en el país. Es más fácil ponernos de acuerdo sobre temas de fondo en la región que en Santiago, porque allá persiste de manera brutal lo ideológico por sobre los problemas».